El exteniente del ejército Pedro Barrientos Núñez, procesado por la justicia chilena durante más de una década como autor del crimen del cantautor Víctor Jara, fue asesinado en Santiago cinco días después del golpe del 11 de septiembre de 1973. Ha sido derrocado y el presidente socialista Salvador Allende (1970-1973) se encuentra detenido en Estados Unidos, lo que fue aprobado por la Corte Suprema en 2013, lo que significa que será extraditado a Chile para ser juzgado.
Barrientos fue procesado en diciembre de 2012 por el juez chileno Miguel Vásquez, quien en ese momento solicitó arresto internacional porque vivía en Estados Unidos desde 1989. En enero de 2013 la Corte Suprema de Chile autorizó su extradición a Chile, según un documento judicial. «Varios antecedentes registrados por el tribunal de instancia nos permiten establecer presunciones suficientes para establecer que la parte requerida participó en los hechos investigados en el caso.»
El exsoldado fue detenido en un retén vial el 5 de octubre, dijo Catalina Barría, investigadora jefe nacional para la cooperación internacional de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), quien explicó que tenía una notificación roja de Interpol por su arresto desde 2013. El delito de homicidio culposo. Ahora están esperando que un juez de inmigración decida cómo se manejará su expulsión de Estados Unidos.
En 2016, un tribunal federal de Miami declaró culpable a Barrientos, además de una indemnización por daños y perjuicios, en el marco de una demanda civil presentada por la familia de Víctor Jara que alegaba tortura y ejecución ilegal del cantante y director de teatro chileno. Y en julio pasado, el juez Roy Dalton del Distrito Medio de Florida despojó de su ciudadanía al exmilitar veterano por su presunta implicación en el crimen del artista.
A finales de agosto, y conmemorando el 50 aniversario del golpe de Estado en Chile, la Corte Suprema confirmó las condenas de siete ex militares condenados por secuestrar y disparar a Víctor Jara. Fallecimiento el 16 de septiembre de 1973 en el Estadio Chile del centro de Santiago, junto al Ltre Quiroga, director del Servicio Penitenciario Nacional del gobierno de Allende. Según testimonios y reconstrucción judicial, sus captores los trataron con especial crueldad y los torturaron durante al menos tres días en ese recinto deportivo: el cantautor tenía 56 fracturas y 44 balazos en el cuerpo, Quiroga tenía 47 fracturas y 23 impactos de bala.
«Los prisioneros de cierto significado general fueron identificados por las autoridades militares y separados de los demás, y durante sus períodos de detención, tanto Víctor Jara Martínez como el Capitán Abraham Quiroga Carvajal fueron reconocidos por las autoridades militares» y luego «segregados». custodia especial, sufrimiento durante su cautiverio, episodios sostenidos y violentos de agresiones físicas y verbales”, se lee en el fallo de agosto.
Los cuerpos de los luchadores comunistas Víctor Jara y Littré Quiroga fueron arrojados el 16 de septiembre de 1973, en un terreno baldío cercano a las vías del ferrocarril cercano al Cementerio Metropolitano. Algunos transeúntes los reconocieron y les informaron. Familias, familias.
Víctor Jara escribió canciones como Derecho a vivir en paz Y Te recordaré Amanda. Fue detenido al día siguiente del golpe de Estado del dictador Augusto Pinochet (1973-1990). El 11 de septiembre de 1973 respondió a la invitación del presidente Allende y se dirigió a la Universidad Técnica del Estado (UTE) donde trabajaba.
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