«(…) Las fronteras de Pisiga y Tambo Quemado estarán abiertas los siete días de la semana, los 365 días del año», dijo la jefa nacional de aduanas de Bolivia, Karina Serrudo.
El funcionario asumió que la decisión brindará acceso ilimitado a los puertos marítimos del Pacífico, los puertos de Arica e Iquique, abiertos a todo el sector importador y exportador boliviano, destacó.
En conferencia de prensa, en presencia de funcionarios chilenos y empresarios bolivianos, Cerudo explicó que por las fronteras de Pisica y Tambo Quemato pasa diariamente el 45 por ciento de los camiones que transportan cargas de exportaciones e importaciones bolivianas.
Un promedio de 1.880 camiones diarios pasan por la aduana en importaciones o exportaciones, dijo, y al menos 850 pasan por las fronteras de Pisiga y Tambo Quemato hacia diversos puertos.
«Por eso Chile y Bolivia acordaron abrir estas fronteras sin restricciones», subrayó el administrador, «un hecho histórico para todo el comercio exterior boliviano».
Con este acuerdo, los beneficiarios no sólo son el comercio exterior boliviano, sino también el sector turístico, destacó Cerruto, ya que los visitantes pueden viajar de Bolivia a Chile y viceversa durante todo el día, lo que actualmente sólo es posible en 10 horas.
“Con esta apertura fluida de la frontera de Tambo Quemado y Pizica en la República de Chile vamos a impulsar el turismo. Y significa que toda la gente (…) puede visitar fiestas como el Carnaval de Oro o lugares como Uyuni”, dijo.
Desde el punto de vista comercial, el acuerdo colocará a Bolivia en una posición estratégica para el tránsito de mercancías entre el Pacífico y el Atlántico.
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